FLOR DE ORO

FLOR DE ORO

En un país lejano, cayó una pepita de oro, después que se asustaron con un fuerte aguacero que duró horas y horas….

Los indígenas corrieron y corrieron cuando escucharon el golpe del metal, cuando atravesó las nubes y cayó al suelo

Un indígena como de 14 años salió con mucha prisa, con un gran susto, la recogió del piso.  Él se quedó contemplando la pepita y estaba hechizado con el brillo que despedía esta hermosa joya amarilla, tan refulgente como el sol.

 

 El indígena era de la tribu de los Caribe y la bautizó con el nombre de ARAVENEY, y llamaba a Araveney así:

¡Araveney, Araveney, hermosura que linda eres¡ y Araveney le sonreía, pero un hada que los contemplaba, sintió celos y decidió bajar de su nube y con un rayo de su varita mágica le arrancó la pepita de oro de las manos al indígena y la lanzó hasta el fondo de un barranco para desaparecerla, pero, empezó a llover (ploc ploc ploc) y la pepita de oro se convirtió en semilla y se empezó a humedecer y a abombar, le salieron unas hermosas raíces y empezó a crecer y crecer: 1 metro, 2 metros, 3 metros, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11,12 metros y en las ramas le salieron unos brotecitos, fulgurantes flores amarillas que parecía una flor de oro.

                                                                                                      Las abejas sonrieron bzzz bzzz bzzz, porque ahora había más néctar, los pájaros cantaron. Fui fui fui, más alegres sus trinos, sobre todo el turpial, que estaba encantado  ante tanta belleza de oro.

Desde ese momento los indígenas Caribe, cuando veían que el Araguaney iba a florecer, hacían un círculo y se sentaban a contemplarlo.

Y colorín colorado………… 

AUTORA: CARMEN JOSEFINA BARRETO