"AMADO POR LAS NINFAS"

                          GOLPE TOCUYANO por EXPRESIÓN LARENSE

"El que golpea a otro, recibe el mismo golpe con la violencia de su furia"

EL SUFRIMIENTO

Se cubría el pecho con arrogancia, imponente, majestuosa, y lo llamaba; y su voz se oía ensordecedora, insostenible, fluctuante;
Julio avergonzado le llega cerca, baja la vista cuando descubre la desnudez angelical que lo atrapa en su mirada; enrolla las alpargatas dentro de la camisa y las arroja hasta la otra orilla.  
Con pasos imprecisos se le acerca y oye una vocecita melíflua que lo invita a saborear la frescura de las aguas: - Vamos a bañarnos, vamos, vamos-
El pantalón no poseía los cierres de hoy día y él con manos temblorosas lo va desabotonando lentamente, poco a poco, y su mirada fija  en sus hermosos ojos, tropieza de repente con las extremidades de la diosa.
!Dos patas de pato! pensó...
Y la sangre se le agolpó en el cerebro, en el cuerpo, todo él era un torbellino.
- !Membranas entre los dedos!, exclamó en voz alta!!!
- !Como los de un anfibio!, confirmó... poco visible debajo de las aguas turbulentas, reafirmó.
Aquello tan impresionante, como un chispazo lo despierta, su corazón impulsa la sangre a borbotones, retrocede, toma sus aperos y sale corriendo asustado,
su rostro como el hielo, voltea varias veces y sólo ve detrás de él a "la sierpe" subyugada, que lo persigue desesperada, por la pérdida de lo que estaba tan cerca de poseer, y
Julio que llega a salvarse, a una casita donde es recibido con los brazos abiertos y donde ofrenda su cuerpo desmayado buscando el cobijo y el consuelo.
Dulcinea corre a través de las aguas,

golpea,
gime,
grita con ecos lastimeros,
levanta olas agigantadas,
hace huir a los peces en su arrojo,
se sumerge ante las profundidades,
quiere desaparecer, y piensa que allí lo puede conseguir,
revuelve las aguas y las convierte en remolino,
atrapa lanchas, personas, animales,
se vuelve sórdida, sus ojos centellean, sus lágrimas se confunden con el averno;
como una fiera enjaulada hace mil veces un camino, su olvido de la palabra clemencia le permite disponer de todos esos cuerpos  a su antojo.

Gime, llora, grita, sus lágrimas se confunden con el averno

Próximo Capítulo: EL BAUTIZO......

(Todas las imágenes son tomadas de Google)