TRANSFIGURACIÓN

El 10 de agosto estuvimos en la capilla de la comunidad, con el aparato de sonido, cornetas y micrófonos para acompañar a los niños y niñas de la primera comunión, primeramente estuvieron atentamente en Misa, recibieron su primera comunión y luego al llegar nosotros, nada más que Víctor y yo, nos dispusimos a cantar música venezolana; seguidamente los niños bailaron música folklórica, cantaron, degustamos unos pastelitos, galletas, arroz guisado con casabe, canapés, y por último cantamos el cumpleaño feliz a la capilla de La Transfiguración del Señor, que es así como se llama junto con un pedazo de torta, todo muy rico, aportado por los representantes de las primocomulgantes y las catequistas, aprovechamos de bailar también algunos adultos, para no desperdiciar la oportunidad con la música que estaba sonando, y pude saludar a excompañeras de  trabajo que tenía tiempo que no veía, al ser jubiladas después que lo hiciera yo.
No pudimos comunicarnos con Lisset, ni con Gloria, pero aún así pasamos un rato bien agradable hasta aproximadamente cuatro de la tarde. 

ÚLTIMOS INSTANTES

Si pudiera vivir nuevamente mi vida...en la próxima cometería más errores.No intentaría ser tan perfecta; me relajaría más. Sería más tonto de lo que he sido, de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad. Sería menos higiénico. Correría más riesgos; haría más viajes, contemplaría más atardeceres, subiría más montañas, nadaría más ríos, iría a más lugares a donde nunca he ido; comería más helados y menos habas, tendría más problemas reales y menoss imaginarios
Yo fuí de esas personas que vivió sensata y prolíficamente cada minuto de su vida, claro que tuve momentos de alegría, pero si pudiera volver atrás, trataría de tener solamente buenos momentos. Por si no lo saben, de eso está hecha la vida, sólo de momentos.
No te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos, que nunca iba a ninguna parte sin un termómetro, una bolsa de agua caliente, un paraguas y un paracaídas.
Si pudiera volver a vivir comenzaría a andar descalzo a principio de la primavera y seguiría así hasta concluir el otoño.
Daría más vueltas en calesita, contemplaría más amaneceres y jugaría con más niños; si tuviera otra vez la vida por delante; pero ya ven, tengo 85 años y sé que me estoy muriendo...

JORGE LUIS BORGES (Últimos momentos)

Jorge Francisco Isidoro Luis Borges Acevedo nació el 24 de agosto de 1899, en la calle Tucumán 840, pero su infancia transcurrió al norte de su casa natal, en la calle Serrano 2135 del barrio de Palermo. Era hijo de Jorge Guillermo Borges, un abogado y profesor de psicología con aspiraciones literarias y de Leonor Acevedo Suárez, uruguaya, traductora. 

Fueron los últimos años de viajes ya que a finales de enero de 1986 fue internado en el Hospital Cantonal de Ginebra. El 14 de junio murió en Ginebra. Fue enterrado el cementerio de Plainpalais.

Borges se ha convertido en uno de los autores fundamentales del siglo XX, y uno de los más reputados escritores de relatos breves. Supo dar a éstos una dimensión atemporal, a caballo entre la ficción y la no ficción, que inició un nuevo estilo.
Si bien la poesía fue uno de los fundamentos de su quehacer literario, el ensayo y la narrativa fueron los géneros que le reportaron el reconocimiento universal.

CRISTALES LUNARES

Primorosa y dulcemente, una florecilla marciana,entre luces de múltiples colores,sonríe por los múltiples recuerdos que vienen a su mente.
En un ambiente árido y solamente alumbrado por la luz mortecina de un sol rojo como la tarde, esta lánguida florecilla se debate entre el viento y la arena, que caen sobre sus frágiles pétalos, color ya, de tierra.

Mas allá, unas envidiosas florecillas, en lo alto del cerro, la observaban con rabia y le gritaban: ¡¡ojalá se te caigan los colores¡¡ ¡¡ojalá¡¡ ¡¡ojalá¡¡
De entre ellas, la más alta y fuerte,la más panzuda, la que tenía abundancia de pétalos, y como si fuera la capataz, tomó un puñado de arena entre sus manos y se la arrojó con arrogancia y desdén, a lo que florecita, se agachó muy triste y compungida
Florecita se limpió su cara suave y llorosa; observó con tristeza que sus pétalos estaban perdiendo su único y amado color, el poco que le quedaba y unas lagrimitas anaranjadas salieron de sus ojos, impregnando con ellas todo el ambiente.
En eso, interviene el señor Don Sol marciano y con cara de pocos amigos, eleva la temperatura de su cuerpo y las achicharra lentamente, a lo cual salen despavoridas a esconderse.
Don Sol marciano, conmovido por la fealdad, en la cual ya se estaba convirtiendo florecita, y la angelical pureza de su alma, decide ayudarla, se comunica con el Mago Digital y le ordena que utilice una computadora espacial para convertir, con sus rayos las lágrimas que dolorosamente ella derramaba, en piedras preciosas.
Florecita, asombrada observa como la luz del sol, cristaliza sus gotitas que van cayendo poco a poco encima de sus pétalos marrones.
Cada piedra se adhiere a ella, transformándola de una insignificante florecita marciana a la más bella e iridiscente. 

Conflicto: El miedo de florecita a verse marchitada

Tema: la envidia

Personajes de primer plano:

Protagonista: Florecita Marciana
Antagonista: Flor Panzuda

Personajes de segundo plano:

Don Sol Marciano
El Mago Digital

Personajes de Tercer Plano:

Comparsa: Flores envidiosas

Momento de la Narración:

Presentación: Ambiente (Descripción)

Luces de múltiples colores
Aridez                                   Ambiente
Luz mortecina del sol

Viento y arena
Lo alto del cerro                   Topografía

De tarde                                Tiempo

    Retrato

Florecita: dulce - primorosa - frágil

Fea:          triste - compungida - cara suave - marrón angelical

Flor Panzuda: desdeñosa - arrogante - fuerte- envidiosa

Comparsa: envidiosas

Sol:            conmovido 

Etopeya

El sol:     poder en primer plano

El Mago Digital: Segundo plano

La Flor Panzuda: Sobre la comparsa

Flores: comparsa

Florecita: De último, la más humilde

Climax: En eso interviene el señor Don Sol Marciano

Final: Las gotitas cristalizadas

Descenlace Final: Las piedras se le adhieren haciéndola la más bella.

EL MUÑEQUITO

Qué te pasó, que te saliste del cuarto?, (mi nieta sólo tiene tres años) no dijiste que ibas a dormir?.
 Yo la veo que viene gateando de su cuarto, sin fuerzas para estar parada. -Es que estaba un muñequito en el cuarto, riéndose ji ji ji y me asustó mucho. 
Yo me fuí a ver qué había en el cuarto y sólo ví un reguero de ropa doblada tirada por el piso
Le contesté. -Yo te voy a preparar un palito, para que cuando veas el muñequito, lo agarras a palos y le dices que se vaya, pero se lo dices bastantes veces, hasta que se vaya.
Al rato me trajo el cepillo de barrer y me dijo: ¡muy buen palo me preparaste abuela¡, y se fue corriendo a su cuarto, a golpear a quién sabe qué ente en estos espacios, la cama, la cesta de ropa, el escaparate, las paredes; cuando me acerqué a la puerta del cuarto, me dio la impresión, de que se había sobresaltado, pegando gritos como ¡¡fuera¡¡, ¡¡vete de aquí¡¡, ¡¡tú no vives en esta casa¡¡, ¡¡fuera de mi casa¡¡ y salió corriendo hacia la sala con el corazoncito a todo vapor. 
Al rato, salimos a comprar la comida y había un martillo de goma, de esos grandes de colores, que hacen bulla y le dije que podríamos usar eso para lo que ella sabía y con una mirada inteligente me dijo que si con la mirada. 

Llegamos a la casa y lo primero que hizo fue agarrar el martillo y dirigirse al cuarto a repetir el ¡fuera¡, ¡sal de mi cuarto¡, a golpear repetidas veces los distintos lugares y desde ese día más nunca se pudo oir que se había asustado  otra vez. 
Después de ese día, oigo que llora y salgo corriendo a ver qué le pasa, le pregunto: Qué estabas haciendo antes de caerte Andrea?
Yogüela, yo estaba felíz, bailando, dando vueltas y vueltas, mirando al techo, estaba muy felíz y pum¡¡¡....

EL CEBOLLÍN

Personajes

El agricultor
El cebollín
El sol
papel marrón para la tierra
recortes de papel para las gotas de agua
El azadón 
1 regadera, puede ser de cartón


Había una vez un agricultor que empezó a abonar la tierra para sembrar unas semillas, le colocó vitaminas, muchas vitaminas, la removió con el azadón y le echó bastante agua, la dejó bien bonita para empezar a sembrar un cebollín
Lo tomó y lo llevó a donde el sol lo besara con sus rayos, lo sembró con mucho amor.
Pasó el tiempo... el cebollín empezó a decaer y el agricultor se preguntaba por qué???
El cebollín se estremecía y tambaleaba hasta que se cayó al suelo, el agricultor todo angustiado corría de un lugar a otro, no sabía qué hacer, cuando vió que gotas de lluvia caían sobre el cebollín, él gritaba de alegría y pudo constatar que el cebollín se estaba fortaleciendo, y con un abrazo y un apretón de manos le dio la bienvenida a la renaciente plantita.

ViSITA AL ANCIANATO

Ayer 28 de julio de 2019, fuimos al ancianato La Esperanza, donde los ancianos son atendido muy pulcramente, están todos limpiecitos, tanto el ambiente como las personas internas allí, que son personas de la tercera edad y dos jóvenes que pude observar, una de ellas con problemas motores y otra igual que aparentemente sufrió algo cerebral y permanece en una silla de ruedas.
El señor Victor montó el aparataje de sonido, Lissete le ayudó y en un rato pudimos cantar; empecé yo con las canciones venezolanas La Noche de tu Partida, Desilución y Cuando me faltas tú, luego pasó Lissete con Junto al Jagüey, Muchacha de Ojazos Negros, siguió el señor Victor con unas canciones que incluía joropos y alababa sobre la belleza de nuestra música, siendo Venezuela 1, Venezuela 2, Venezuela 3, Venezuela 4 Venezuela 5, que es la de hoy que estamos viviendo, y siempre será Venezuela. Después de este paquete de música venezolana le damos inicio a la música romántica conmigo interpretando  Caminemos, luego Obsesión y Dos Almas; pasó Lisset y cantó sus lindas canciones como Bésame Mucho y pasodobles, luego cantó Gloria su música de Sonora Matancera; al final inició Víctor con su cancionero que lleva en el cerebro, de años y años de experiencia.
A un lado mío se encontraba una mujer de tercera edad, que me sonreía de vez en cuando y yo también la miraba y le sonreía, hasta que me dí cuenta que habia sido representante mía porque le dí clases a su único hijo en una escuela de la localidad.. Lo cierto del caso fue que ella se levanto de su silla y se puso a mi lado, hablándome de que estaba muy delgada y yo le contesté igual que yo también estaba muy delgada, pero que por el volumen que había no podíamos hablar y le prometí que dentro de un rato lo haríamos, que se sentara, porque ya me tocaba cantar. Ella se fue hasta el fondo del salón y se sentó. Pienso ahora que se acordó de mí y necesitaba hablar en ese preciso instante y no después como yo se lo sugerí.
De repente, una de las encargadas nos dijo que bajáramos el volumen de la música porque una de las ancianas estaba muy nerviosa y ella tenía que ir a averiguar qué era lo que le pasaba. Y era precisamente mi amiga la que se sentía mal
Así se hizo, llegó la hora del almuerzo, todo el mundo almorzó y me voy a donde está mi amiga, me siento a su lado y le pregunto por su comida, si ya había comido, me responde que sí, pero que no se la había comido toda porque iba a quedar muy inflada y me señala su estómago.

Después de esas palabras que tuvimos le pregunto si se acuerda de mí, por dos veces, y me responde que "lo tenía aquí y se le perdió, que no sabe si alguien se lo llevó", asombrada le vuelvo a preguntar si sabe quién soy yo, y me respondió con otra cosa diferente; viendo que no podía hilar un pensamiento me levanté con mucho pesar y dolor en el alma, al contemplar a una mujer que había sido personal administrativo del liceo más grande de mi comunidad, y ver que sufre de demencia senil y mal de Alzheimer, que si no reconoce a su propio hijo, menos me iba a reconocer a mí.
Bueno, así y todo, las personas bailaron, cantaron junto con nosotros, y pudimos despedirnos hasta después del mediodía, recogimos nuestros cachachá y salimos.
Qué terrible es querer olvidar¡¡¡¡¡

MI PRIMERA COMPUTADORA

Mi primera computadora me costó 18.000 bolívares, (1991) claro sin ratón.

Cuando mi hija mayor cumplió 15 años, en el año 1991, me pidió un equipo de computación como regalo de cumpleaños y que no me iba a pedir más nada... mentira me sacó también la fiesta. 
La computadora me costó 18.000 bolívares, igual que mi casa; pues bien, el regalo también fue para mí porque todos los domingos lo primero que hacía era encender el equipo y ponerme a estudiar todo el día, hasta que aprendí a manejarla, Y como lo mío es aprender para extraerle jugo, ofrecí mis conocimientos para hacer currículos, montar tesis, tarjetas y diplomas, que antes lo hacía artesanalmente, dípticos, trípticos, investigaciones, dibujos, presentaciones en power point, copiaba libros de internet aumentando así la colección de mis gustos, elaboraba, editaba e imprimía mis creaciones, como  poemas, cuentos e investigaciones en la comunidad donde trabajaba.en fin la computadora fue mi varita mágica para inventar lo que a mis manos le costaba. 
Realizaba trajes completos en papel, se los ofrecía a las alumnas, las fotografiaba y luego les vendía las fotos que imprimía, por supuesto todas compraban su foto y con el dinero compraba recursos para el salón, para que ellos mismos lo utilizaran.
Me vino a la memoria mi poca experiencia y buen tiempo con una computadora en mis manos, cuando una colega está atascada con un cuadro en word, y yo humildemente le digo que la puedo ayudar, ella deja que toque su Canaima, pero el cuadro llevaba su tiempo, pero si se podía resolver a lo que la chica quería. 
Mientras yo trabajaba en el cuadro, ella llamó a otra joven y le pidió que por favor le resolviera; con una sonrisa en los labios le entregue la laptop, pero esta nueva chica no supo qué hacer y se la devolvió. 
Yo me dí la vuelta y no tuve más qué hacer con respecto a la solución del problema que ya estaba encaminado.
En ese momento es cuando me doy cuenta que mis arrugas le dieron a entender a esta joven que soy una analfabeta cibernética ante ella que tiene un año con la Canaima que les donó el gobierno. jaja, no me queda más remedio que sonreir ante las incongruencias de la vida.