Mi Voz nació cantarina
con gorjeos y susurros...
y risas,
reí contigo
en primavera y estío.
Mas todo se ha transformado
ya mi voz está quebrada
como cristal estallado
entre unas manos sensibles.
No pude mirarlo todo
por mis ojos de riachuelo
unas veces anhelantes
taciturnos, misteriosos
y otras veces delirantes.
Por eso...
Mi voz dejó de cantar
y susurrarle a las piedras
lo iluso de su ficción
con vértigos de un orate.
Y el viento cerró mis ojos
con su lluvia de quimeras
que no las pude hacer mías
ni tocar en la penumbra.
mas...palpé insistentemente
a ver si tactaba algo
mas fue en vano
pues los años me aplastaron
inmisericordemente.
Y no te pude palpar
tampoco en mis sentimientos
sólo toqué la penumbra
la toqué insistentemente
pero mis manos cansadas
nunca encontraron tus manos.
Y mis huesos se encorvaron
reduciéndose a cenizas
hasta ser polvo de tierra
en la faz del universo.
Pero mi voz sigue allí
rasgando hasta el espejismo
en la montaña, en el eco,
en la nube y en el cielo
en las hojas de los árboles
en la faz y en el reverso,
buscando mil pensamientos
que la hagan suya otra vez.
Y al tomar alas de viento
y música de las esferas
surquen en haces de luz
el añorado infinito.
13-junio-2000
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