Mostrando entradas con la etiqueta Boves. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Boves. Mostrar todas las entradas

miércoles, 22 de septiembre de 2021

¿DEJARÁS QUE TE CORTEN LA NARIZ?

 


Estaba muy grave la situación general de la República de Venezuela, ya que Boves se había presentado en Calabozo al frente de 6000 jinetes y destruído en San Marcos a la División encargada por Campo Elías de proteger los caminos de Los Llanos hacia las altiplanicies. La guerra adquiere aspectos de increíble barbarie, ya que como sabemos el español Rosete avanza hacia el Tuy, dejando en su camino rastros de sangre y cadáveres horriblemente mutilados, ya que los patriotas son torturados en medio del regocijo de sus tropas y las mujeres entregadas a la soldadesca, Boves muy vengativo deja huellas de devastación y muerte a donde quiera que llega.

Relata O´Leary -"Un día, le presentan (a Boves) en su marcha un anciano enfermo y descarnado, único habitante del pueblo de donde habían huído los demás al saber de su llegada. Después de algunas preguntas, a las que el anciano respondió con dulzura y veracidad, lo mandó decapitar.  Al instante salió de entre sus filas un joven que frisaba en los 15 años y postrándose de rodillas ante el caballo del bárbaro, le dijo: 

-"Os ruego, señor, por la Santísima Virgen, que perdonéis a este hombre que es mi padre; salvadle y seré vuestro esclavo". - Bien, dijo el monstruo sonriendo al oir las súplicas fervientes del joven, 

-Para salvar su vida, dejarás que te corten la nariz y orejas sin un quejido.

 -¡Si! ¡si! respondió el infeliz, 

-¡Os doy mi vida, pero salvad la de mi padre!. 

El muchacho sufrió con admirable serenidad la horrible prueba; visto lo cual, Boves mandó que lo matasen junto con el padre, por ser demasiado valiente y por temer que también se convirtiera en insurgente.



Bolívar de Indalecio Liévano Aguirre 1974

martes, 21 de septiembre de 2021

LA BATALLA DE CHARALLAVE. I


Efrén Calero, de la revista Matria nos hace un recuento de la Batalla de Charallave, no sin antes darle el piso que necesitaba para su desenvolvimiento  desde la pérdida de la Primera República en el año 1812.
Aparecen en escena los realistas José Tomás Boves, Francisco Rosete y Francisco Tomás Morales, ya que se hace más intensa la matanza por esta parte y los republicanos ejecutan a los presos españoles y canarios de Caracas y La Guaira, ordenada por Bolívar en el 1814. En febrero de 1814 tiene lugar la Primera Batalla de La Puerta, donde resulta vencedor Boves, establece su comando, divide sus fuerzas en tres para atacar a Caracas con Morales y Valles del Tuy con Rosete.
Rosete va hacia El Paso de los Pilones, llegando al sur de los Valles del Tuy, Ocumare, (11 de 02), donde encuentra al pueblo sin armas y poca tropa para defenderse. El presbítero Juan José de Orta envió un mensajero para interceder con Rosete, pero éste se lo asesinó, avanzó implacablemente hasta llegar  la iglesia donde cometió una barbarie absoluta matando a mujeres, niños y ancianos que se habían ocultado allí. (1814). Conocida la noticia, los pobladores abandonaron sus casas y se fueron a Caracas.
 Cuando el Coronel Juan Bautista Arismendi, Gobernador de Caracas sabe de estos hechos, solicita ayuda al Libertador, quien le avisa a José Félix Ribas, que acababa de vencer en la Batalla de La Victoria, e iba hacia Caracas y decide entrar a Charallave; Rosete que se entera que venía Ribas, aunque él iba para Caracas, se atrinchera en Charallave a esperarlo y enfrentarlo.
Es aquí donde empieza la batalla, con la llegada de los republicanos a Charallave,  (20 de 02), y en el sector Potrerito, Ribas vence una de las fuerzas de Rosete; reorganiza sus tropas, para llegar al centro del pueblo, para ubicar a Rosete que está atrincherado en la hacienda Alvarenga, lugar donde la batalla se inicia desde las dos de la tarde, y en una hora logran vencer a un enemigo malvado y sediento de sangre, logra que se desbanden en retirada y Ribas ordena su persecución y captura. 
En medio de la huida Rosete deja abandonado una gran cantidad de armas, municiones, prisioneros, equipajes y documentos de guerra como cartas, planos, pliegos,en fin pruebas de él y de los realistas de Caracas y La Guaira.



Así quedan los traidores de la Patria, huyendo y dejando pruebas de su traición.