Estos son mis secretos, mi biblioteca, frases, relatos, historias y cuentos, que celosamente he guardado en mi nube, de los lugares donde he trabajado como maestra, en Venezuela, que ha llenado mi vida de satisfacciones; poesías que han salido del fondo de mi alma para botar con sus letras mi deslastre. ¡¡¡¡Que entre la vida de nuevo!!!! Y como Pablo Neruda: "Confieso que he vivido"
En este mes se han despedido de nuestra urbanización tres personas, uno cada semana; las cuales no han sido por algún virus, sino porque el acortamiento de su vida depende o ha dependido de las propias emociones; una chica joven fallece en los edificios que están frente a la escuela, de la enfermedad mortal del cáncer, que no mira a niños, adultos, jóvenes o viejos; más allá muere una mujer ya entrada en años, su corazón estaba cansado y decidió cortar la energía que lo conectaba con la vida. Más acá, al lado de mi casa, un caballero también decidió partir. Total que las señoras rezanderas han estado sumamente ocupadas; al terminar con los novenarios en el edificio, salieron a seguir rezando hacia las últimas veredas, y cumpliéndose los nueve días, ya por aquí estábamos velando al vecino y empezando el novenario al día siguiente, cumpliéndose hoy el segundo día del rezo. Paz a sus restos.
