Después de revisar resúmenes de libros de una editorial, lo guardé ya que no podía leerlos todos, porque era mucho el material que había; estaba buscando el nombre de un escritor, con el cual tuve una conversación sobre sus muchas títulos que ya había publicado y el primero que saltó a mi vista y a mis manos, lo tomé con agrado para leerlo de inmediato.
De esas publicaciones había uno, el primero que tomé en mis manos, cuyo título era: Carta a una Maestra de Felipe Carrasco.
Salté de la cama, tomé lápiz y papel y escribí el nombre del escritor y el título del libro, creyendo que no lo iba a recordar; en la mañana recordé la conversación, el nombre del escritor y el título del libro. En la tarde, después que llegué del preescolar, me senté en la computadora a goglear, encontré profesiones varias, pero ningún Felipe era escritor y menos un Felipe Carrasco.
Ahora lo que me intriga y quiero saber es;.... Y el mensaje?, Cuál es el mensaje? y si no lo recibo en el día, cuándo lo recibiré..? Hoy no lo recibí, me hubiera gustado recibir ese mensaje, aunque el universo se vale de miles de artimañas para dejar por sentado lo que solamente te interesa a ti, o para hacer que te enteres. Nada pasa desapercibido para las almas o para nuestro Espíritu Divino.
