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lunes, 11 de abril de 2022

GUAICAIPURO Y COLÓN

 


La historia nos cuenta que antes del primer viaje de Cristóbal Colón hubo naves que atravesaron el océano Atlántico y de manera fortuita llegaron a territorios americanos. En aquella época, el poco conocimiento del mundo provocaba misterios y fantasías, mitos y leyendas. La posible existencia de otras tierras se confundía con aquellos relatos, lo que le restaba validez e importancia. Sin embargo, esos cuentos atraían e incitaba a los navegantes, que se aventuraban a los viajes con destino hacia lo desconocido. La curiosidad los hizo correr riesgos y vencer peligros, para descubrir y conocer lo inexplorado y hasta entonces ignorado. (Por los europeos)


Un Encuentro Imaginario

Colón: ¡Que feliz soy! Han pasado 530 años desde el descubrimiento de América. Yo sabía que había nuevas tierras….

Guaicaipuro: ¿Quééé? ¿Descubrimiento? Si nuestro continente no estaba ni escondido ni cubierto. Ahora se le dice: “Encuentro de dos mundos”….

Colón: ¿Y en qué se basan para decir eso?, porque mira que yo sé de geografía y en ningún mapa aparecían ustedes…

Guaicaipuro: Pero eso no quiere decir que no existiéramos, estábamos aquí desde hace muchísimo tiempo. Teníamos nuestras propias costumbres y creencias.

Colón: Bueeeno, como sea. Lo cierto es que en esos días ví cosas interesantísimas…animales, frutas que no conocía…

Guaicaipuro: Si, a mi me pasó lo mismo. Aquí nunca habíamos visto perros, vacas, caballos, cerdos, asnos; tampoco café, naranja, uva, trigo, cebada cambur, limón y plátano.

Colón: Para nosotros era nuevo el tomate, el tabaco, la papa, la piña, el maíz con el que hacen esas arepitas y el cacao con el que hacían esa bebida de chocolate tan deliciosa.

Guaicaipuro: Hablando de otra cosa, que gracioso nos parecía su idioma. Y pensar que ahora el español lo hablan casi todos los venezolanos.

Colón: Era necesario enseñarlo para poder comunicarnos.

Guaicaipuro: A pesar de eso, los indígenas que están en Venezuela conservan sus propias lenguas: el wayuú, el yanomami, el kariña, el pemón, el warao, el añú…

Colón: ¿Te fijaste cómo son los venezolanos de hoy? Ellos vienen del mestizaje que se dio cuando indígenas, españoles y africanos nos mezclamos.

Guaicaipuro y Colón: La diversidad comenzó el 12 de octubre de 1492…

Textos extraídos de La Cadena Tricolor 9 de octubre de 2007, ¿Qué pasó el 12 de octubre de 1492?, para ser usado por los docentes en conmemoración de este encuentro positivo y negativo.

Esta obra de teatro se puede aplicar desde tercer grado, aprendiéndose cada día un párrafo,  para hacer un total de seis días. Si los muchachos se pueden aprender tantas canciones, refranes y contar cuentos poco educativos podemos obtener con motivación que se memoricen este también

sábado, 12 de junio de 2021

A COMER MANGOS, ¡ES UNA ORDEN!


 Y llegaron los mangos....

Nos trajeron su dulzura, su sabor tropical en cada variedad que hemos probado; el primer día de comilona de mangos, una amiga  nos llamó:-Vengan a buscar mango. Más rápido que inmediatamente, buscamos el bolso y nos fuimos Victoria y yo, hasta el cruce de la esquina, donde la señora Graciela nos llenó el bolso con el mango de jardín, que es un mango del tamaño del puño de una mano, amarillitos, redonditos con bastante carne. Al día siguiente, igual, estuvimos casi la semana completa buscando mangos de esa variedad y comiéndonos una bolsa diaria.

En esos mismos días, una exalumna me lanzó al jardín una bolsita con mangos y topocho filipino que rinde bastante por lo gordo que es.


Luego realizamos un trabajo de inscripción de unas niñas en el OPSU, que son las oportunidades de estudio para el sector universitario y nos trajeron como cancelación del servicio un bolso de mango hilacha, que es un mango muy sabroso y una piña grande con la que hicimos una torta. 



Luego, a los días se acercó a la casa un exalumno para comprar casabe, al rato oigo que me llaman otra vez y era que me traía un aguacate del tamaño de una cuarta y otro poco de mangos redondos, grandes para hacer jugo, creo que es mango-piña.


Un señor que me había quedado debiendo una parte del dinero del casabe, me dijo que estaba avergonzado, que por la tardanza, aceptara tres aguacates de su mata, más el dinero que debía.


Al día siguiente me llegó una representante del preescolar, pidiendo auxilio para el proyecto de siembra de su hijo, y por delante traía una bolsa de mangos de injerto, ¡que sabrosos!., que se parecen mucho al mango "pico de loro", no sé si será el mismo.

Y limpiando la cocina encontré una bolsa con cuatro lechosas verdes para hacer dulce, el tradicional dulce de lechosa venezolano y una bolsa de mango salado, que ni la perrita quiso.


Pero como los mangos son para todos los gustos, los mangos salados tienen su fans, se los comen con sal, adobo y demás condimentos de la cocina. También hay quien se lo come frito como plátano y dicen que sabe a plátano.

Esto quiere decir, que podemos sustentarnos o mantenernos de la  agricultura familiar, saber lo que comemos, lo llamaban antes el conuco, pero como los nuestros son espacios muy pequeños,  los tenemos que adecuar a nuestras necesidades, y en mi comunidad, todos están sembrando a excepción de los edificios que la oportunidad que tienen de sembrar es en macetas, y eso para plantas que no tengan mucho peso.

Por ejemplo en mi casa tenemos lechosa, plátano o cambur, tody, espinaca, auyama, limón, pira, tamarindo, batata, ocumo, pimentón, y plantas medicinales como Caña la India, Cucaracha, Orégano, Toronjil, Jazmín Azahar, Yuquilla, y otras cuyo nombre no alcanzo; ya que siempre me cuidé de no cubrir con cemento todo el espacio, sino que dejé el jardín en el frente y en la parte posterior con vegetación.

No es mucho el espacio pero se le ha sacado provecho y he podido intercambiar o regalar, para agradar.