jueves, 25 de marzo de 2021

VUELTA EN CÍRCULO: CEPA 2

 Parece que dimos una vuelta en círculo, un círculo de un año, porque justamente hace un año nos quedamos en cuarentena con la primera cepa del coronavirus, todo estuvo suspendido, las clases, las reuniones, los clubes, las fiestas, toda reunión de mucha gente estuvo suspendida, ahora volvemos a lo mismo con la fuerza y el poder que tiene la cepa brasilera que es más contagiosa que la primera. Entró por La Guaira, se dirigió a Caracas, Miranda, Guárico, Anzoátegui, Mérida; la estamos sufriendo en Charallave y Ocumare del Tuy mi comunidad, ya van tres fallecimientos, aquí cerca de mi casa, personas conocidas; dicen que están colapsadas las funerarias y tuvieron que pedir auxilio a las de la población cercana de Cúa. Da la impresión que en Ocumare la gente no se tomó en serio la pandemia y es el municipio más contaminado. 

Si sabemos que se han cumplido las reglas, todo el mundo vende hasta las doce, después de ahí se cierran los negocios, sobre todo en la cuarentena radical. Ahorita la Radical será hasta el cuatro de abril, ya se ha vacunado un montón de personas: salud, maestros, secretarios, porque pensábamos que las clases iban a empezar después de Semana Santa, pero sólo fue ilusión, porque el virus es más fuerte de lo que muchas personas pensaron. Aparentemente parece que empieza con inflamación del corazón porque no se aguanta el dolor en las costillas y la gente debe detenerse varias veces caminando por la fatiga que proporciona y hay quienes duermen sentados para solucionar lo de la respiración.

Así que a usar el tapaboca, los guantes, desinfectarse las manos y suerte.


                 ¡¡¡Que vida, susto tras susto!!!

miércoles, 24 de marzo de 2021

TE TUMBARON? SI, CANTAN2

 Recuerdo que estaba reunida con mi bebecitos de primer grado, algún alumno me decía: _"Maestra vamos a cantar"; por lo general cantábamos todos los días, inclusive cuando estaban realizando la tarea que tenían en el pizarrón, escuchaba entonar la última que habíamos ensayado, que podía ser "Sombra en los Médanos", "Patico, patico", "Palomita Blanca", "El Cocherito Leré", "himno al Árbol", al "Araguaney", "Préstame tu máquina", Madrecita", "Barlovento", "Ding ding din", "Parranda a la Nación", "Fuego al Cañón", y así un montón de canciones o aguinaldos más que tenía recopilados en un libro, extraviado ahora; pero como estaban cantando bajito y estaban escribiendo su tarea, no había ningún problema; yo les respondía que sí, que cuando terminaran de hacer lo que estaba en la pizarra cantaríamos.

Terminaron, ese día, y me paré en el centro del salón a tomarlos de la mano para cantar, los que faltaban por terminar sus textos iban quedando relegados, nosotros esperando, cuando veía que estaban todos ya agarrados de mis manos derecha o izquierda y empezamos a cantar: "Palomita blanca, copetico azul, llévame en tus alas a ver a Jesús, ...." después que terminamos de cantar, como estaban tan entusiasmados con la canción, con mi mano derecha daba un jalón mínimo, imperceptible y el primero se caía y jalaba al siguiente hasta que caíamos todos al piso, por supuesto yo con mis tacones, no hacía más que reírme de la situación y ellos acusándose mutuamente: "fue él  maestra", "no... fue él", "no..no...fuiste tú", "fue ella maestra", "no no fue ella", y así todo el mundo señalando al otro y riéndose, les pedía que me ayudaran a parar del piso, "ya que me tumbaron" , porque yo no podía ya que me caía a cada rato y me llevaba al piso a quien me quería levantar, y toda la muchachera encima de mí queriendo levantarme. 

Un día más, divertido, por supuesto que cuando llegaban a sus casas relataban aquella barbaridad que habían hecho cuando sus compañeros tumbaron a la maestra que estaba solamente "cantando". 

Al día siguiente regresaban completicos, para no perderse el siguiente episodio, y los representantes preguntando: _Josefina y que te tumbaron??.


lunes, 22 de marzo de 2021

Y LA DIFUNTA SE SENTÓ EN LA CAMA

 


 Tendría yo como nueve años, porque estaba en tercer grado de primaria, en las monjas Adoratrices que estaban ubicadas en la avenida San Martín de Caracas, vivíamos en la casa de mi padrino, el cual nos había dado, para que viviéramos,  la parte del fondo de su inmensa casa: habitación, cocina, patio con un gallo que me atacaba cada vez que me veía, quién sabe, por qué?; lo cierto es que se muere su señora madre y me dejan a mi, a cargo de ella mientras buscaban la funeraria, me voy para la habitación, por supuesto de lejitos como respeto a la muerte, busco una silla y me siento enfrente de ella, de repente a la difunta se le sale un eructo, qué extraño? Me digo, y decido acercarme a ella, pensando que tiene los gases atorados en el pecho y cierro mis manitas colocándolas como puño, le doy dos golpes debajo de las clavículas, y le sale un eructo y.... otro eructo, asustada retrocedo cuando veo cómo se sienta para caer otra vez y quedarse inmóvil, lo que me hace quedar con los ojos desorbitados, atónita, paralizada agarrándome la falda de mi vestidito, toda nerviosa,

 hasta que oigo la voz de mi padrino que me dice: "_Fuera - fuera, ve a tu casa, que de ésto nos encargamos nosotros los adultos, que sabemos lo que hay que hacer para cada situación".



domingo, 21 de marzo de 2021

ME DEBEN 3 CESTATICKET

 Estaba trabajando, normal, iba todos los días, faltaba poco o nulo a mis actividades escolares, nunca llegaba tarde, cumplía con todas las comisiones que me encargaban; ese es mi ritmo de trabajo, ha sido y será si vuelvo a trabajar en el preescolar; me dedico a hacer lo que me encomendaron, voy a mi aula, soy poco charlista, cuido a mis muchachos en el recreo, y me despido hasta el día siguiente; en esa oportunidad alguien poderoso en este ámbito me cambió de escuela, me mandó para Aragüita, pero a mi no me lo participaron; yo seguí asistiendo a mi escuela como todos los días, así que pasó un mes, un segundo mes y un tercer mes, sin que mi cesta tickets viniera; no había explicaciones, porque tengo entendido que cualquier persona en Ocumare me conoce, ha oído hablar de mí, y no había motivos para decidir que mi bono alimenticio lo usara otra persona, lo devolvieran, se lo repartieran, etc  y si lo devolvieron a la zona educativa, allí tenían la obligación de hacer un llamamiento a las autoridades educativas de mi institución para saber qué estaba pasando conmigo. Pero absoluto silencio: ineficiencia total.

Una persona me asomó la idea de que me fuera a Los Teques a las autoridades educativas superiores a preguntarle la causa por la que no me habían mandado mis bonos; elaboré una misiva muy fuerte a un tal Basilio, que quizás no tenía culpa de nada, no obtuve respuesta. Me fuí entonces a Recursos Humanos, no sé por qué llegué ahí, pero obtuve respuesta: la secretaria me informó que yo tenía tres meses trasladada a una institución en Aragüita, me preguntó además que en cuál escuela me iba a quedar, le contesté que en la que estaba trabajando, hasta que me jubilaran y así lo hice; y que mis cesta ticket estaban siendo enviados a esa escuela; me fuí a la susodicha escuela y saludé a un montón de gente que conocía; esperé para recibir información, pero todo el mundo ignoraba alguna respuesta satisfactoria para mi. Total mi tiempo perdido, mis alumnos desatendidos, y todo lo que hice para recuperar mis cesta ticket fue nulo. 

Claro, no me hizo falta porque siempre he tenido otro sueldo con los trabajos que hago fuera de la escuela, que me gustan: manualidades, pintura, tarjetas, diplomas, trabajos en computadora, láminas escritas o sólo dibujo, cuadros de conceptos o mentales, láminas de fiestas, murales, asistencia a estudiantes,  pero ese no era el caso, el caso pertenece al Valor de la RESPONSABILIDAD y cada quién sabe en qué falló. Yo seguí asistiendo, trabajando y cumpliendo con mis obligaciones con mis alumnos, de la escuela y de la comunidad. Lo demás no importa.Lo escribí porque lo recordé


sábado, 20 de marzo de 2021

MI NOVATADA Y EL SOCIOGRAMA



 Había llegado nueva a dirigir una escuela de educación inicial, y me pareció lógico aplicar un sociograma porque a mi me lo había aplicado el profesor de sociología en mis estudios como maestra, pues quería saber qué calidad de amistad o compañerismo existía en la escuela, ya que sentía algo de tensión, además necesitaba saber cómo hacer los engranajes para el trabajo que se avecinaba.

Apliqué mi sociograma y supe quién quería trabajar con quien; la escuela estaba dividida en dos partes, una donde estaba la dirección del plantel y la otra en otro lado cerca de este local, sólo había que bajar unas escaleras.

Las muchachas que querían estar juntas, quedaron juntas y dos muchachas que no aparecieron en ningún grupo, quedaron fuera para trabajar en la sección después de las escaleras, donde tenían más espacio, porque era un salón abierto, espacioso, sin problemas para mí que era la que iba a estar en el centro de la reunión. Pero pasó lo inimaginable, se me presenta en la tarde a mi casa la madre de una de las chicas que por cierto ya estaba casada y con fruto, a reclamarme el por qué yo había mandado a su hija a la parte de abajo, con unos ademanes y vocabulario que fueron muy desagradables; le expliqué lo del sociograma,  lo que significaba y que yo sencillamente estaba ejecutando lo que el 99% de la comunidad quería. La señora no aceptó mis explicaciones, se marchó muy contrariada, pero la chica, a diario insistía en un lenguaje de amenazas a las compañeras, con venganzas mágicas y demás tonterías.

Así pasó el poco tiempo, un año, muy incómodo en convivencia, hasta que decidí renunciar a un cargo que no me importaba en absoluto, porque yo lo que soy es maestra, no dirigente de adultos, me fuí a Los Teques, Ministerio de Educación, departamento de Recursos Humanos y les expresé mi deseo de renunciar para irme a la escuela que me quedaba en el  frente de mi casa: me extendieron una hoja de color, escribí mi renuncia y el lugar a donde quería ir, me hicieron inmediatamente el traslado y llegué a la escuela Rosa Peña para el turno de la mañana, al día siguiente, sin pena ni gloria, en el año 1984, de donde salí jubilada en el año 1996. 27 años de servicio, para el Ministerio de Educación desde 1968, con un año privado que no me aceptó. 


                         El que se va no hace falta.

viernes, 19 de marzo de 2021

EN ROSA PEÑA

 En la escuela Rosa Peña, (1984-1996) yo estaba asignada para ejercer mis actividades como maestra de primero, luego segundo, tercero y me devolvía a primer grado otra vez; para finalizar el año preparábamos una buena fiesta de despedida, porque el primer piso del edificio  era únicamente para atender a los alumnos que venían de preescolar o de su casa. Cada salón tenía 35 a 40 alumnos, nos dividíamos el recurso que se entregaría para efectuar la fiesta, ejemplo, primer grado A: se encargaría de las tortas, dulces, quesillos, caramelos; primer grado B: se encargaría de los refrescos y el hielo; primer grado C: se encargaría de la comida salada, arroz guisado, pasapalos; primer grado D: se encargaría de platos, vasos, pitillos, servilletas.

Tres maestras junto con los representantes se encargarían de servir la comida a los niños, instaladas en una o dos aulas, mientras yo me dedicaba a distraer al alumnado; cada alumno llevaba su pupitre al pasillo para sentarse junto con sus demás compañeros y a evitar que los niños de otros grados se colaran en ese pasillo, ya que cada uno tenía un aula con su maestra esperándole. Para evitar esto colocaba a uno que otro representante al final del pasillo y de esa manera se controlaba el flujo de alumnos  

En ese espacio se cantaba, jugaba, decía poesía, se bailaba, 

hacíamos rondas, eso sí todo era bajo normas de disciplina, no era permitido hacer desorden, ni salirse de las reglas establecidas, mientras degustaban la comida y los postres traídos por sus representantes. Toda una belleza de niños, ordenados, responsables, obedientes, ya que por esas cualidades habían aprendido a leer y a comportarse, a realizar tareas diarias y cumplirlas.  

En el primer grado el alumno aprende a comportarse para siempre, es la formación que se le da al alumno de primer grado para que emprenda su viaje por sus diferentes salones y cada vez con un maestro diferente. Que aprenda a escribir, que tenga un cuaderno limpio, ordenado, con las puntas derechitas, que use todas las hojas, que no rompa el cuaderno, que no le arranque pedazos, que no escriba en la parte de atrás, que pinte todos sus dibujos, que no le de pena cantar o decir una poesía delante de sus compañeros, que aprenda a contar, sumar, restar y escribir números y discriminarlos.

Y es más satisfactorio cuando te los encuentras en el camino de la vida o te reconocen o te dan un gran abrazo de agradecimiento.



jueves, 18 de marzo de 2021

MI FANS

 Cuando mi nieta Vicki estaba en primer grado le tocó una maestra muy dulcita para su temperamento y capacidad histriónica, además de conversadora imparable, que parece más bien un radio prendido;  lo cierto es que la maestra decía: 

_Vamos a hacer una cartelera y la alumna le replicaba: 

_Maestra, mi abuela Josefina hace unas carteleras bien bonitas. 

_Ajá muy bien Victoria.

_Niños, vamos a cantar una canción, 

_Maestra, mi abuela Josefina canta bien bonito, es cantante y tiene un cuaderno lleno de canciones

_Me tienes que presentar a tu abuela, Victoria

_Niños vamos a la hora del cuento, les voy a contar un cuento con el nombre de xx:

_Maestra, mi abuela Josefina cuenta muy bien los cuentos, es la mejor del mundo.

-Ajá muy bien Victoria, me tienes que presentar a tu abuela.

-Si maestra, vamos a ir a mi casa para que la conozcas.

_Niños vamos a repasar las letras

-Maestra, mi abuela se lo sabe todo, hasta el abecedario, a,b,c,d,e,f, ma me mi mo mu.

Total que la maestra vino un día a traer la niña para la casa, y me participò que necesitaba conocerme porque la niña sentía tal admiración por mi, que no dejaba de nombrarme en cada actividad que ella iba realizar. Me imagino que la maestra se sintió contra la pared, pensando que la muchacha sabía cómo hacer todas las actividades porque a los pocos meses fue cambiada de salón, para una actividad  administrativa.

Es que si me pasa a mí con un alumno, primero que nada le felicito al familiar y después le planteo la libertad o individualidad de cada ser humano y que cada uno de nosotros actuamos y hacemos las cosas de manera diferente y siempre sale original y bien, y que todos los frutos, cualquiera que sea,  son buenos, bonitos y aceptables.